Respuestas tibias ante agresiones a migrantes
Rafael Cienfuegos Calderón
La relación de México y Estados Unidos en política migratoria es el cuento de nunca acabar. Cuando el vecino país adopta medidas drásticas, como la reciente Ley SB4 en Texas para detener y deportar a los migrantes que viven ilegalmente en su territorio, el gobierno de México responde ofendido con declaraciones oficiales que en la práctica no sirven de nada porque nada resuelven.
La secretaria de Relaciones Exteriores (SRE), Alicia Bárcena, “reprobó” su entrada en vigor el 19 de marzo aduciendo que pretende detener el flujo de personas migrantes mediante su criminalización, fomentando la separación de familias y discriminación racial que atentan contra los derechos humanos.
El gobierno de México –abunda el comunicado- “rechaza” tajantemente cualquier medida que permita a las autoridades estatales o locales ejercer labores de control migratorio, detener y retornar a personas nacionales o extranjeras a territorio mexicano.
También “cuestionó” las disposiciones legales que afectan los derechos humanos de más de 10 millones de mexicanos que residen en Texas al exponerlos a ambientes hostiles de odio.
La secretaria Bárcena dijo tajante: México no “aceptará” bajo ninguna circunstancia repatriaciones por parte del estado de Texas”.
La cuestión es que reprobar, rechazar, cuestionar y no aceptar las leyes antiinmigrantes de Estados Unidos no es suficiente, pues a final de cuentas siempre se aplican.
La ley SB4 de Texas -impugnada por el presidente Joe Biden- que convierte en delito estatal la entrada irregular al territorio y permite a las autoridades locales arrestar y deportar migrantes, fue promulgada en diciembre de 2023 por el gobernador del estado, Greg Abbott y su entrada en vigor se fijó para principios de marzo, pero acciones legales interpuestas la dejaron en pausa. Ahora la Corte Suprema de Estados Unidos dio luz verde a Texas para implementarla de inmediato.
Ante la gravedad del asunto ¿por qué el gobierno del cambio y la transformación se limita a emitir tibias declaraciones?
En un mensaje (19-12-2023) el Presidente expuso: “Decirle a nuestros paisanos y migrantes que vamos a estarlos defendiendo, que el gobernador de Texas actúa de esa forma porque quiere ser candidato a vicepresidente”, y que la Secretaría de Relaciones Exteriores ya trabaja en la respuesta formal de México y en una estrategia jurídica para evitar que entre en vigor.
Y ¿qué pasó, señor Presidente?.
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