Opinión

ATISBOS

Sequía impacta social y económicamente a la población
 Rafael Cienfuegos Calderón

Para 2024 se pronostica escasez aguda de agua en ciudades y centros urbanos por ausencia de lluvias en la mayor parte del territorio, bajo almacenamiento en presas y embalses, insuficiente abasto para consumo humano, menor producción de alimentos vegetales y animales e incremento de sus precios.

Así, la falta de agua no se limita a ser un problema climático, lo es también social y económico.

Datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP) de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) a diciembre de 2023 indican que la superficie sembrada fue 7% menor a la de 2022, que en estados como Zacatecas, Aguascalientes y San Luis Potosí con altos niveles de sequía puede ser de 48%,  y que lo ya sembrado corre el riesgo de perderse.

La inflación al consumidor en enero fue de 4.88% anual, manteniéndose tres meses consecutivos al alza y el incremento lo determinó  el precio de los productos agropecuarios que acrecentaron a 9.75% la tasa anual, la más alta desde febrero de 2023.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que el incremento de precios de jitomate, 25.64%; cebolla, 7.16%; y tomate verde, 8.71% -variación quincenal- incidió en la mayor inflación, y que comparativamente con otros bienes y servicios del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), los alimentos en general crecieron por encima de esta.

El considerable incremento de precios en productos agropecuarios es imputable a un choque de oferta por la sequía que ocasionó que en el último trimestre de 2023 las actividades primarias (agricultura, cría y explotación de animales, aprovechamiento forestal, pesca y caza) retrocedieran 1.1% y registraran un crecimiento anual de 0.1%.

Con el panorama de sequía en la mayoría de estados, este año los alimentos seguirán subiendo de precio ante la escasez  (José Arnulfo Rodríguez San Martín, director de Análisis Económico y Financiero de Banco Multiva, Excélsior, 12-02-2024).

Sequía y falta de lluvias tienen en lo social y económico un impacto negativo para la población: disminuye la disponibilidad de agua para consumo humano y provoca enfrentamientos por acapararla; al caer la producción de alimentos agrícolas y pecuarios los precios subirán afectando la economía familiar.

Pero el actual presidente ha privilegiado la producción de hidrocarburos sobre el sector hídrico.

A Pemex asignó 140 mil millones de pesos para 2024, condonó 80 mil millones de impuestos, dio 1.5 billones para su rescate financiero, y gasta más de 340 mil millones en la Refinería de Dos Bocas. La Comisión Nacional del Agua (Conagua) recibirá 63 mil millones de pesos y entre 2019 y 2024 acumulará apenas 280 mil millones (Carlos Urzúa “R.I.P.”, El Universal, 19.02-2024).

Acerca de Juan Carlos Machorro

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