Opinión

LO COTIDIANO CON CLASE

POR: PEPE CAMARA

Con la firme convicción de evitar la añeja práctica del matrimonio infantil que viola sustancialmente los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes, el Pleno del Senado aprobó por unanimidad de 118 votos, modificar y derogar diversos artículos del Código Civil Federal.

La reforma establece que para contraer matrimonio es necesario haber cumplido 18 años, y dispone, entre otros puntos, que el Juez del Registro Civil, al recibir una solicitud de matrimonio, esté plenamente autorizado para exigir a los pretendientes, bajo protesta de decir verdad, las declaraciones que estime convenientes, a fin de asegurar su identidad, mayoría de edad y aptitud para contraer matrimonio.

La asamblea aceptó un cambio al artículo 159 del dictamen, presentado por la senadora Geovanna del Carmen Bañuelos de la Torre, del PT, para precisar:

“El tutor no puede contraer matrimonio con la persona que ha estado bajo su guarda, salvo en el caso de que obtenga dispensa, la cual se le concederá por el Presidente Municipal respectivo cuando hayan sido aprobadas las cuentas de tutela”.

Al presentar el proyecto, la presidenta de la Comisión de Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, senadora Josefina Vázquez Mota, manifestó que México es de los 10 países con mayor número de matrimonios infantiles, con casi un millón 300 mil casos anuales.

Las niñas que se casan no permanecen en la escuela, tienden a embarazarse prematuramente y tienen más riesgo de sufrir discriminación y violencia doméstica.

Las consecuencias son dolorosas: casi 50 por ciento de las mujeres que contraen nupcias antes de los 18 años sufren violencia física, alrededor del 70 por ciento padece violencia sexual y 16 por ciento, violencia económica.

El Pleno escuchó  intervenciones de  senadoras de distintos grupos parlamentarios. Ana Lilia Rivera Rivera, presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda, coincidió en que esta práctica incentiva múltiples violaciones a los derechos de los menores, al no estar preparados para asumir responsabilidades inherentes al matrimonio.

“Es vergonzoso que el Estado mexicano continúe recibiendo recomendaciones sobre matrimonios infantiles de organismos internacionales y no las atienda”.

Lilia Margarita Valdez Martínez, de Morena, afirmó que el matrimonio infantil funciona como una norma social. Casarse con niñas menores de 18 años, tiene sus raíces en la discriminación de género.

Del PRI, Verónica Martínez García, manifestó que se debe cerrar este tipo de prácticas. “Debemos darles a las menores condiciones óptimas para que disfruten sus derechos en cada etapa de su vida”.

La senadora de Encuentro Social, Eunice Romo Molina, consideró que el matrimonio infantil afecta principalmente a las niñas, con la modificación se da un gran paso para proteger los derechos de niñas y niños. Queda pendiente el Código Civil que tiene numerosas figuras contrarias a la máxima protección de los derechos que debe brindar el Estado.

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