El excandidato presidencial Ricardo Anaya es contundente, al advertir que “ Andrés Manuel López Obrador (AMLO) quiere llevarnos hacia una dictadura”. Critica que “el Presidente que tantos golpes de pecho se daba, que se decía demócrata y admirador de Madero, en los hechos volvió a hacer una jugada tramposa”, pues la renuncia del ministro Zaldívar le abre la puerta al nombramiento de un nuevo ministro incondicional, que durará 15 años en el cargo.
Explica Anaya que “en este proceso lento, gradual, pero muy claro hacia un régimen dictatorial, el Presidente sabe que necesita tomar el control de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Entonces, primero presionó a un ministro para que renunciara y así poner a un incondicional suyo en su lugar. Y ahora acepta la renuncia de otro ministro, sin causa grave, como exige la Constitución, para otra vez poder nombrar a un incondicional”.
A continuación, detalla el proceso de nombramiento del nuevo ministro, a cargo del Senado, y concluye que “el presidente sabe” que no tiene la mayoría calificada que se requiere, pero si los senadores rechazan sus ternas, por ser de incondicionales, entonces “el presidente nombra a quien él quiera”.
“Por eso digo que se trata de una jugada perversa, traposa, alevosa. Hoy los senadores de oposición tienen una enorme responsabilidad. La responsabilidad de mantenerse unidos, de actuar con absoluta lealtad a México y con enorme inteligencia”, enfatizó.
Ricardo Anaya recalca el peligro de no darse cuenta a tiempo de la gravedad de la situación y espeta: “el día que Morena tenga el control total de la Suprema Corte, se acabó la democracia. Te pongo un ejemplo sencillo. Entonces sí pueden pasar una ley que desaparece al INE, y ya no va a estar ahí la Suprema Corte para decir que eso es contrario a la Constitución. Créeme que si logran controlar la Suprema Corte, ese será el principio del final”.
Anaya reitera: “No tengas ninguna duda de que nos quieren llevar derechito hacia una dictadura. Un país dominado por una sola persona y un solo partido. Si en las elecciones de 2024 no los detenemos, muy pronto no quedará nada de la democracia que hoy conocemos. Yo aún tengo esperanza. Hagamos todo lo que esté en nuestras manos para salvar a México”.
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