En México se está desarrollando un novedoso segmento pecuario dedicado a la crianza de búfalos de agua, que será incorporado como Sistema Producto en la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación del gobierno mexicano (SAGARPA), debido al crecimiento de esta actividad en el país que alcanza actualmente un hato de 120 mil ejemplares, aseguró el coordinador general de Ganadería de la dependencia, Francisco Gurría Treviño.
Este sistema pecuario fue anunciado en la IX Simposio de Criadores de Búfalos de Agua de América y Europa, en donde se indicó que este segmento será apoyado en los estados donde se ha convertido en una actividad productiva de carne y leche con alto valor nutritivo, además de que representa otra buena opción de ingreso para los productores y la generación de empleos.
Dijo que para México la crianza de búfalos representa una excelente oportunidad para diversificar la acción gubernamental y acompañar iniciativas que se salen de la rutina, como lo son también los ranchos cinegéticos y otras actividades rentables, sustentables y que representan una buena opción de ingreso económico y generación de empleos.
Los búfalos se crían debido a que su carne y leche tienen un alto valor nutritivo además que se utilizan como animales de carga y yuntas en el campo. Es un animal rústico y su mantenimiento es menor al de sus similares.
Su carne carne y leche bufalina tiene 40 por ciento menos colesterol, 55 por ciento menos de calorías y 11 por ciento más de proteína y 10 más de minerales.
Explicó que, en otras latitudes del planeta, como India, la exportación de carne de búfalo representa un alto porcentaje de sus ventas al exterior, por ello su producción ha ido en aumento en otros países como Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela, Guatemala, Costa Rica, Belice, Estados Unidos, Canadá, Italia y México.
Dijo que esta actividad, puede fomentar el intercambio cultural con otros países de Asia y África, además de ser una propuesta económica en el futuro de México. Por ello se impulsará su inclusión como Sistema Producto, para que tengan un espacio dentro del sector y en la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG).
Los primeros búfalos de agua (se les llama así porque necesitan estar un tiempo en el agua por lo delgado de su piel y además saben nadar y bucear) fueron traídos a México en 1996. Se trata de una raza europea mediterránea y tras casi 20 años de adaptabilidad su producción se ha extendido a estados como Puebla, Oaxaca, Chiapas, Campeche, Tabasco, Jalisco y Guanajuato.
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