Isabel Studer, directora del Instituto Global para la Sostenibilidad comento que los acuerdo de la Cumbre de las Partes 21 (COP21) París 2015 son diversos y entre los aspectos centrales esta la transparencia y el apoyo financiero a los países subdesarrollados.
Dos rubros que están intrínsecamente enlazados, y en donde México debe prestar atención, ya que para ser receptor de apoyos internacionales se debe optar por transparencia en el actuar de acciones y políticas ambientales, lo cual no es una costumbre de la Federación, que actúa a través de la Secretaría del Medio Ambiente (Semarnat).
Destacó que en transparencia se tendrá un sistema global para todos los países para reportar sus emisiones y esta información será evaluada por expertos internacionales, de ahí que México debe dar a conocer porque de un plumazo cambio sus mediciones y declarar por medio de Semarnat que México dejaba de emitir cientos de toneladas de dióxido de carbono (CO2) y de subir hasta casi 20% en energías limpias, -del cual sólo 4% es de fuentes renovables- contabilizando la energía nuclear e hidroeléctrica, que nadie en el mundo considera.
En entrevista con este reportero, indicó que “se dice que existe compromiso oficial con la transparencia, pero al gobierno no le gusta ello, pues no quiere compartir información, y esto va a rangos culturales y mientras igual una sociedad que lo exija no sabemos en donde estamos parados en política ambiental y a dónde queremos ir. De ahí que los acuerdos de París que evaluara los avances de las naciones obligará a instancias como Semarnat a trabajar y ser transparentes”.
Por su parte, el investigador, Daniel Chacón, del Centro de Investigación LARCI, indicó que la ley de transición energética es única y será una gran palanca del desarrollo nacional; pero que debe actuarse de forma adecuada en su concreción y su reglamento a ser aprobado ya que en el mundo se están moviendo 330 mil millones de dólares de inversión global en energía renovable y México debe buscar parte de esos dineros para el desarrollo nacional.
Ejemplificó que los Estados Unidos su nueva matriz de energía un 60% es renovable. De ahí, detallo que es una ley moderna es esencial para México y que al final tuvo que vencer un sin fin de intereses creados en el país que le impidieron consolidarse desde hace años.
Recordó que México es un país altamente incongruente en sus gastos energéticos y contaminantes; de ahí que “se quiera ser ambientalmente responsable con nuevas normativas. Pero en donde se aglomera en energía limpia a temas como es la nuclear, conflicto e inclusión de conceptos que otros países no tienen y esto subió el porcentaje de energía renovable generada en México. Y se habla de tener el 25% del total nacional al año 2018”.
En el caso de Semarnat, indicó que debe emitir normatividad de contaminantes de la industria eléctrica como es carbono y ello no existe, lo cual es una falta de trabajo y de poco compromiso con la sustentabilidad de parte del titular de Semarnat, Rafael Pachiano y en entrevista con este reportero, lamentó que ello viene desde antes y recordó que quien designo a Pachiano, su exjefe, Juan José Guerra Abud, se la pasaba “gritando a los cuatro vientos que el gas natural era la mejor energía limpia, cuando en realidad no es limpia, sino menos contaminante”.
Los impactos ambientales del sector energético y sus estudios deben ser a nivel regional, así como debe haber transparencia en emisiones, rol de gran importancia que recae en hombros de Semarnat en la ley de transición energética, pero que dicha dependencia federal no está trabajando en lo más mínimo al respecto. Expreso lo anterior al participar en la mesa de análisis «México ante el acuerdo de París y la adopción de la ley de transición energética: retos y oportunidades», realizado por el IGS en el Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México.
Expreso que “es clave la transparencia ya que los acuerdos internacionales y nacionales deben tener esquemas de este tipo; ya que la sociedad lo exige y las metas de mitigación son aspectos muy serios y no se tienen los medios para alcanzar dichas metas. Compromiso de transparencia que no tiene Semarnat o Sener o la CFE”.
Denunció que “actuamos de forma parroquial y por grupos de interés se hacen estas definiciones y por cabildeos de partidos se logra incluir aspectos de energía nuclear u otros sectores como un aspecto limpio, cosa que nos lleva a hacer el ridículo mundial.
URBANISMO Y EMISIONES SIN SER TOMADOS EN CUENTA
Dijo que “el crecimiento de las ciudades no es revisado por nadie, se tiene mal diseño urbano y la nueva infraestructura por corrupción nace vulnerable y esto pese a la información académica que marca en donde se puede edificar para evitar problemas de falta de servicios, daños por fenómenos naturales y que en muchas entidades autoridades locales, estatales y federales no utilizan y construyen por conveniencia política”.
Lamentó que el “Cambio Climático no es prioridad nacional, pero el atender otras prioridades significa que no se atienda a este rubro que va implícito de rubros como la educación, salud, urbanismo, agua, etc. añadiendo que se requieren modernizar el funcionamiento y legislación de instituciones que tienen pensamientos del siglo pasado como la CFE”.
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