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Se requiere una política estructurada para controlar autos “chocolate”

           El pasado 31 de enero del 2013, venció la validez del «Decreto por el que se regula la importación definitiva de vehículos usados», con lo cual se mantiene y prevé aumente la entrada de automóviles usados de los Estados Unidos hacia México, acarreando diversos males ambientales para las ciudades mexicanas.

           Además que se prevé un incremento en el número de amparos, de vehículos que no cumplen con los términos de importación y en el flujo de automóviles importados por la frontera norte de México y diversas organizaciones ambientales como el Centro Mario Molina, alertaron de esta situación que ha provocado que se cuente con más de 7 millones de automóviles chocolate en México que se concentran en el norte y bajío nacional.

Por ello pidieron que se acabe de entender esta situación como un negocio que daña el medio ambiente y coadyuva en las miles de muertes por contaminantes que registra México al año, además que se debe acabar con la corrupción de los jueces que dan amparos a los exportadores de estos automotores.

Salvador Montero, Coordinador del Sector Transporte en el Centro Mario Molina declaró al respecto «se estima que desde el 2005 hasta la fecha han entrado cerca de 7 millones de vehículos usados, es decir, casi un millón de vehículos anualmente limitando la introducción de tecnologías más limpias e impactando directamente en la calidad del aire en el país».

Por su parte, Gustavo Alanís, Director General del Centro Mexicano de Derecho Ambiental, estipuló que «los amparos ante la importación de vehículos importados se están incrementando sustancialmente, debilitando paulatinamente los beneficios iniciales que ofrecía el Decreto. Es necesaria una solución definitiva y a largo plazo».

Finalmente, Salvador Herrera, Director Adjunto del CTS EMBARQ México, afirma que «los autos importados representan una solución engañosa para el individuo, pero jamás serán la solución para satisfacer las necesidades de movilidad de la sociedad. Se podría decir que incluso la entorpecen e imponen altos costos a la competitividad de nuestras ciudades.»

Pidieron al Gobierno Federal enfocar las posibilidades de desarrollo nacional en un crecimiento verde y seguir fomentando este tipo de acciones, para nada se acercan a este tipo de finalidades.

 

Acerca de Juan Carlos Machorro

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