Legisladores del PRD, como Fernando Belauzaran, Mario Delgado, Manuel Granados, encabezan a un grupo de perredistas, junto con otros personajes, como Héctor Aguilar Camín, Jorge Castañeda, Fernando Gómez Mont, Ernesto Zedillo (ex presidente) Miguel Ángel Mancera, jefe de Gobierno, para legalizar el incremento en la portación y consumo de marihuana, hasta por 35 gramos. La pretensión ya tomó camino hacia el Poder Legislativo. No es un asunto “de marihuanos”. El entorno es de una droga. Por la cual hay centros de tratamiento por adicción de humanos.
El debate está abierto. Bajo un presunto eje de sustentación, de consumo por terapia, de uso medicinal. No es para erizarse de los pelos. Es un fenómeno que tiene identidad y propósito. Como tal, hay que detenerse y abrir algunas reflexiones, simples y sin prejuicios. Empecemos por interrogantes para la reflexión y las respuestas:
¿Por qué se combate el hábito, adicción o vicio de fumar, ante los miles de enfermos pulmonares en hospitales?; ¿podrían informar de los índices de atención médica por adicción a la marihuana?; ¿por qué no hay médicos en la campaña, qué digan que efectos mentales negativos genera la marihuana?; ¿argumentar que es terapéutica, igual es oír música o ir al campo, sin caer en adicción?; Holanda es su referente, de consumo, ¿por qué en 30 años es restringido y no cundió en toda Europa?. Aquí lo dejamos. Esto apenas empieza.
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