En la semana 27 de la pandemia se tienen casi 37 mil fallecidos en México. Sin embargo al sumar los casos sospechosos se tiene una cifra de casi 39 mil fallecidos. Al respecto, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, de la Secretaría de Salud, indicó que es muy necesario que los mexicanos sigan atendiendo los mensajes de quedarse en casa, no dejarse llevar por rumores de x ó y medicamento o algo que apreciaron en redes social, pues el automedicarse acaba siendo más contraproducente.
Por su parte, el dr. Simón Kawa, director general de Coordinación de los Institutos Nacionales de la Salud, dijo que la calidad medica que se otorga a los pacientes depende de acciones del personal médico y éstas se implementan en base a datos científicos.
Existen diferentes gradientes en base a la evidencia muy robusta, pues no es lo mismo lo manejado en prensa que tiene muy bajo peso, a diferencia de aquello divulgado en ensayos clínicos y una revisión sistemática y ensayo clínico controlado.
Detalló que la evidencia científica robusta indica que no existe evidencia en ciencia para recomendar algún tratamiento farmacológico para tratar la COVID-19. Por ello, no se recomienda uso de fármacos como arbidol, oseltamivir, ivermectina, colchicina, entre otros. A diferencia de los ensayos clínicos del remdesivir, favipiravir, sarilumab, entre otros.
A su vez, Alethse de la Torre, directora general del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH, detalló qué las recomendaciones que se deben dar a la población tienen que ser claras y comprensibles, para que se entienda los graves problemas de la automedicación.
La automedicación puede ser errónea, con repercusiones en el individuo y un ejemplo es el consumir el hidroxicloroquina que provoca latidos irregulares del corazón, la ivermectina provoca dolores de cabeza y la azitromicina que provoca latidos irregulares del corazón y alteraciones del hígado. Ninguno de los medicamentos citados es recomendable, enfatizó.
Explicó que se debe hacer caso a personal médico con experiencia y no dejarse llevar con rumores y seguir las recomendaciones de las autoridades de salud.
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