La organización ambientalista Greenpeace advirtió que las leyes secundarias de la reforma energética continúan siendo un peligro para el medio ambiente y comunidades del país, debido a que el Senado incluyó dentro de la Ley de la Industria Eléctrica, que la energía nuclear es una fuente “limpia” para generar electricidad.
En comunicado de prensa, la organización ambientalista señaló que es un gran riesgo apostar por energía nucleoeléctrica cuando se ha demostrado internacionalmente que es una tecnología sumamente peligrosa, por su capacidad para dañar la integridad de las personas por la radioactividad, además no existe forma segura de eliminar los desechos que genera y favorece la creación de armas de destrucción masiva.
Al respecto, Miguel Ángel Soto, vocero de la campaña de Energía y Cambio Climático de Greenpeace México, dijo que “es un grave error que los senadores hayan permitido el ingreso de la energía nuclear dentro del esquema de energías limpias porque este tipo de energía es la más sucia de todas. En la actualidad no hay autoridad en el mundo que sepa lidiar con los desechos radioactivos que genera esta industria”.
Aún hay tiempo de hacer modificaciones. Soto señaló que gracias a que Greenpeace envió varias observaciones a los legisladores en torno a las leyes secundarias, junto con el respaldo de más de 24 mil personas que se unieron a una petición en línea para excluir de la exploración y extracción de hidrocarburos a las Áreas Naturales Protegidas (ANP), el Senado finalmente añadió un artículo a la Ley de Hidrocarburos en el que atiende esta demanda.
Sin embargo, todavía se está permitiendo que dentro de las ANP se pueda construir infraestructura para la industria eléctrica; avalaron el despojo de tierras, disfrazado de “ocupación temporal” y dieron luz verde a la energía nuclear y al fracking pese a los riesgos sociales y ambientales que representan.
Declaró que debe terminarse con las amenazas de la forma energética es cuestión de voluntad política que ha faltado en los senadores y el gobierno federal. Los diputados tienen la oportunidad de cambiar el futuro de México y construir un país más verde y justo para todos.
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