Opinión

Sonora, secuelas

Vaya con efectos del derrame de tóxicos de la mina Buenavista del Cobre, a los ríos Sonora y Bacanuchi. La mina forma parte del complejo de Cananea. Es empresa del Grupo México.

De los últimos acontecimientos, declaración del titular del ejecutivo de aquella entidad, Guillermo Padrés Elías, tratando como personas no gratas en su estado, a delegados de dependencias y entidades del gobierno federal.

La designación de funcionarios, enlace no mando en estructuras locales, del gobierno de la República con los estados, es facultad de ese orden. Conveniente, no obligación, el acuerdo. Se trata de servidores públicos a cargo de la participación en la construcción de propuestas programáticas en la materia de las secretarías que representan, desde una perspectiva específica, y del seguimiento de su operación, supervisión, evaluación, así como de la vinculación con sus correspondientes en los territorios de su actuación. La figura no contraviene el pacto federal. Se trata de alcanzar congruencia en programas comunes, de haberlos. Asuntos existen exclusivos de la federación.

El gobierno federal, en uso de sus atribuciones y facultades, ha dispuesto medidas tendentes a reparar los daños ocasionados por el siniestro. Ha denunciado los hechos ante las autoridades competentes, PGR, y ha aplicado las sanciones administrativas a las cuales se hubieran hecho acreedores los responsables de los acontecimientos por falta de previsión, de prevención, de atención, en la ocurrencia del evento. Insuficiencia en la respuesta a las demandas de las comunidades afectadas. Efectos severos en agua, aire, tierra. En la vida que en ellos transcurre. Sobre todo en la existencia de las comunidades. Tan delicados son los equilibrios ambientales.

El gobernador Padrés; algunos sectores de la población sonorense; el consorcio responsable del siniestro, sobre todo, se han inconformado por las decisiones federales. Particularmente las referidas a multas y recomendaciones de cancelación de las concesiones. “En su operación, la empresa, genera beneficios económicos mayores. Es importante fuente de empleo”, reclaman. Pudiera ser, pero llegado el caso, quien obtuviera la concesión para la explotación de los yacimientos cupríferos, de minerales que fuera, tendría que ser más eficaz en el cumplimiento de normas ambientales: Entre otras, las fijadas por las leyes, y por el sentido común. Visto está que la legislación no agota el amplio espectro de acontecimientos referidos a la industria.

La actitud del gobernador Padrés resulta temeraria. Por decir lo menos. La designación de delegados del gobierno federal es responsabilidad del gobierno federal, verdad de Perogrullo. Una actitud de desvinculación contraviene principios de coordinación entre dos o tres órdenes de gobierno. Es contraria al interés de los sonorenses. Esa coordinación es necesaria para llevar a buen término planes y programas de gobierno confluyentes en el objetivo de alcanzar mejores niveles de vida para el pueblo al que sirven.

Ese era el espíritu de aquellas reuniones convocadas por el presidente José López Portillo, cuando con voz solemne, en reuniones con representación de los tres poderes del gobierno (desde el que él mismo encabezaba) y de los tres órdenes, anunciaba: “La República está reunida”.

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