Opinión

ATISBOS

Agradece el Presidente a Peña Nieto

Rafael Cienfuegos Calderón

A pesar de que el resultado de la consulta ciudadana fue categórico: que se  investigue y aplique la ley a los expresidentes por los delitos cometidos durante su gobierno, a Enrique Peña Nieto lo investiga la Fiscalía General de la República (FGR) a través de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) pero no por las faltas que cometió sino por lo que supuestamente hizo después en el exilio. Pablo Gómez, titular de la UIF anunció el día 7 ante el presidente transformador que abrió una carpeta de investigación en su contra por recibir beneficios económicos por más de 26 millones de pesos en transferencias internacionales de México a España entre 2019 y 2021. Llama la atención que se dé a conocer esa información en la víspera del inicio del proceso electoral del próximo año en el que estará en juego la gubernatura del Estado de México, además de la de Coahuila, y no sorprende que el gobierno del cambio eche mano de una instancia judicial para perseguir un fin político porque lo ha hecho en otras ocasiones. Así es que si es cierto que se está investigando a Peña Nieto no por la innecesaria consulta para enjuiciar a los expresidentes sino por delitos financieros de años posteriores a su gestión, no es descabellado pensar que el propósito sea evitar a través de la amenaza que intervenga en la elección del estado que gobernó y/o que sirva de piñata de la mañanera para desprestigiar más al PRI y a quien sea su candidato, y, de paso, distraer  la atención de los graves problemas que no se resuelven: inseguridad y violencia , estancamiento de la economía, encarecimiento de la vida por la inflación, etcétera. El Presidente y Morena quieren apoderarse del Estado de México porque es el que tiene más electores (12 millones 247 mil 499 y aporta alrededor de 15% de votos al candidato a la presidencia ganador) y porque con ello gobernaría a 17 millones más de mexicanos. Que Peña Nieto sea para el Presidente factor de preocupación electoral no parece ser el claro motivo de la investigación judicial, pues la información periodística sobre la plácida vida del expresidente en España no da atisbo de que tenga interés por lo que acontece en México, pero sí de que se siente seguro y exento de persecución política a causa de un “pacto de impunidad”. Que si lo hay o no, solo ellos lo saben. Pero qué pensar de lo expuesto en la mañanera de ayer por el promotor de la llamada transformación al referirse a la investigación de la FGR y a Peña Nieto: “Nuestro planteamiento es no perseguir a nadie”; y “lo digo a los cuatro vientos y que se oiga bien y fuerte, le agradezco al licenciado Peña Nieto porque no se metió, como lo hizo Fox y como lo hizo Calderón, en la elección presidencial”. Trascendió, por otra parte, que a Delfina Gómez, secretaría de Educación Pública, se le queman las habas por dejar el cargo (por el que pasó de noche y quizá sea recordada sólo porque decidió que ningún alumno de educación básica reprobará haya aprendido o no en los ciclos escolares 2020-2021 y 2021-2022) y dedicarse de lleno a hacer campaña en el Estado de México en calidad de suspirante a gobernadora.

 

 

 

 

Acerca de Juan Carlos Machorro

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