ATISBOS

Qué bien por la campaña sucia de mentiras y presiones políticas que encabeza el presidente del cambio y la transformación contra el Instituto Nacional Electoral (INE), que es la institución ciudadana más confiable y acreditada del país y pilar de la democracia que se vive en México, porque contrario al objetivo de desacreditarlo y debilitarlo permite que los electores se den cuenta de que lo que quiere es someterlo para que su movimiento-partido se perpetúe en el poder más allá del 2024, incluso por la vía de la asfixia presupuestal. Ojalá y se siga atacando al INE en las conferencias mañaneras –como se ha hecho hasta ahora- para que antes del 10 de abril, fecha en que se realizará la consulta de revocación de mandato, se descubra la argucia del Presidente de que los consejeros, más que nadie el presidente Lorenzo Córdova, se oponen a ese ejercicio de participación ciudadana porque son enemigos de la democracia, siendo que la evidente causa es que no dotaron al instituto de los recursos necesarios no obstante que por mandato constitucional la consulta debe ser como una elección presidencial. El presidente, que promueve su personal proyecto político, quiere que el INE le erija una estatua de oro para que haya antecedente de su paso por la historia, pero le da dinero para una de bronce, y como él quiere la de oro, le dice que sea austero, que baje salarios y cancele los gastos suntuosos, con lo que tendría más dinero para la estatua que quiere. Los votantes tienen la posibilidad de percatarse de que el INE no está contra la consulta puesto que trabaja en ella (ya constató la validez de más de 3 millones de firmas que la respaldan y está por emitir la convocatoria), y de que el problema lo agravará la Secretaría de Hacienda si le niega los mil 738.9 millones de pesos adicionales que solicitó. Por qué, porque aunque el INE ajustó en 64 millones 460 mil pesos el presupuesto de 2022, como se lo mandato el Tribunal Electoral, que sumados a lo que la Cámara de Diputados autorizó para la consulta suman mil 567 millones 480 mil pesos, y bajó el costo de 3 mil 830 millones a 3 mil 500, el dinero faltante impedirá instalar las casi 161 mil casillas que se necesitan en todo el país para cumplir con una consulta como lo mandata la ley. Al respecto Lorenzo Córdova señaló que el acuerdo de la Suprema Corte es claro: hay que hacer la revocación de mandato con lo que los recursos disponibles permitan, hasta donde alcance. A pesar de lo anterior, es de esperarse que el Presidente siga con su guerra sucia contra el INE y que la Fiscalía General de la República de curso a la denuncia penal que presentó el morenista presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, contra seis de los once consejeros.