Notas

No se olvida

 

COMO DICEN las personas de la tercera edad, cuando recuerdan algún pasaje importante de su vida: “eso no se olvida…”, y es, precisamente, la fecha del 3 de marzo de 2004 que el “Profe” René Bejarano no debe olvidar, pues fue cuando, a través de la televisión a todo color y a nivel nacional, se dio a conocer cómo el secretario particular del jefe de Gobierno del DF (en esa fecha, Andrés Manuel López Obrador), recibía miles de pesos en billetes de manos del empresario argentino Carlos Ahumada.

SON TIEMPOS PASADOS, aseguran los seguidores del “Profe” Bejarano, quienes, bajo su manto sagrado, buscan una curul en la ALDF, una jefatura delegacional o un escaño en la Cámara de Diputados, y son muchos, entre ellos, se encuentra haciendo fila, el exsecretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Joel Ortega Cuevas.

EL EXJEFE de la policía capitalina se encuentra desesperado porque los dirigentes de las corrientes perredistas, a las que pertenece, no lo llaman para integrarse como candidato a un puesto de elección popular; él tenía la seguridad de que, para “protegerlo” de las posibles sanciones que le podrían aplicar las autoridades por su participación en los hechos trágicos de la discoteca News Divine, el PRD-DF, partido político al que pertenece, lo enviara a la ALDF en forma directa, por la vía plurinominal.

SI ACASO Joel Ortega logra que lo consideren candidato por algún distrito del DF, en las urnas, los capitalinos podrán cobrar con su voto en contra, la mala administración de la seguridad que hizo como jefe de la policía.

POR ESO, QUIERE la protección del “Profe” Bejarano, pues sabe bien que es el operador político más importante de su partido en la capital, a pesar de los antecedentes de corrupción que tiene y que no ha logrado borrar con sus múltiples recursos, principalmente políticos, a través de la tribu Izquierda Democrática Nacional, que ahora dirige su esposa Dolores Padierna.

Y HABLANDO de la seguridad en el DF, el dirigente del PRI-DF, arquitecto Jaime Aguilar Alvarez, afirma que la Ciudad de México mantiene el liderazgo en materia de violencia y narcomenudeo y sigue prevaleciendo la política errónea en seguridad pública, problemas que se siguen agudizando en la capital del país.

EL LIDER PRIISTA presentó un panorama negro en cuestiones de seguridad en el DF, señalando que sólo el 25 por ciento de los delitos son denunciados, de los que nada más el 4.51 por ciento se concluye en las investigaciones; sólo el 1.6 por ciento queda a disposición del juez, el 1.2 por ciento recibe sentencia y el 1.06 por ciento es condenado. O sea que los hampones, aunque detenidos y enviados a la cárcel, recuperan con facilidad su libertad y siguen sometiendo a los capitalinos.

LA IMPUNIDAD de los hampones es garantizada, según explicó Aguilar Alvarez, pues sólo se registra el 1.06 por ciento de posibilidades de ser condenado un delincuente cuando es denunciado y detenido por la policía.

COLONIAS, BARRIOS y unidades habitacionales, precisa el líder priista, son víctimas de los asaltantes que, en muchas ocasiones, sin escrúpulo alguno, llegan a cometer asesinatos; “la ciudad de México arrastra desde hace varios años, una serie de problemas estructurales, vinculados a un deficiente ejercicio de gobierno y de la gestión pública”.

TIENE RAZON el dirigente del PRI-DF, pues sólo hay que ver la clase de policías que nos ponen en la calle parea cuidar la seguridad pública, jóvenes impreparados en la carrera policial, señores gordos y mal fajados con uniformes de diferentes colores, azules, negros, grises; camisas blancas o camisolas con placas chicas, grandes o bordadas. En fin, el color azul que deben usar los policías ha desaparecido. Además de que los nuevos y viejos policías subieron las cuotas de corrupción. Sólo hay que ver cómo atracan los policías de motocicleta de los sectores de la Delegación Cuauhtémoc.

A PROPOSITO  de la Delegación Cuauhtémoc, en próximo Palíndromo, comentaremos lo que ahí ocurre y quiénes protegen a los funcionarios corruptos.

DESDE ESTE espacio en Mi Ambiente, enviamos nuestras sinceras condolencias a la familia de Alberto Catani, gran periodista y gran amigo, quien falleció la semana pasada. Conocimos a Catani hace muchos años, cuando nos iniciamos en el oficio de periodista, en el diario deportivo ESTO. Descanse en paz.

 

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