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CONECTARTE 1

POR: Luis E. VELASCO YÉPEZ

RECORDARÁN A MICHELENA 

Se acuerdan de aquel diario vespertino capitalino denominado “CUESTIÓN”; Exclusivo para la mujer. Escrito por mujeres para mujeres (marlboro también se hizo exclusivo para la mujer, pero como no fue negocio cambiaron la publicidad a: “Los hombres de verdad, fuman marlboro). Recuerdo cuando salió el primer número de este diario excelente y muy adelantado a su época. Fracasó porque las ejecutivas no lo compraban y muchos menos las amas de casa. Viene a colación el recuerdo, porque fue creado por Margarita Michelena, a quien el INBA y la Secretaría de Cultura de Hidalgo, les rendirán un merecido homenaje a 100 años de su nacimiento. El homenaje a Margarita Michelena, poetisa hidalguense se denomina “Una charla entre colegas”, en la cual participarán Efraín Bartolomé, María Luisa La China Mendoza, Jorge Ruiz Dueñas, Miguel Sabido y Alfonso Valencia, bajo la moderación de Jesús Cataño Michelena, el 18 de octubre a las 19 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes. Mujer de fascinante personalidad que guionista, publicista, creadora de publicaciones, editora, traductora y autodidacta por excelencia. Aprendió sola griego, inglés, italiano y portugués. Esta mujer cultérrima decía que la inteligencia sirve para todo, desde freír un huevo hasta escribir un soneto. Tocaba piano y fue en su tiempo y por muchos años una de las articulistas más temidas y respetadas. Tenía una pluma muy afilada y un ingenio muy venenoso. Ella publicó Paraíso y nostalgia (1945), Laurel del ángel (1948), Tres poemas y una nota autobiográfica (1953), La tristeza terrestre (1954), El país más allá de la niebla (1969) y Reunión de imágenes (1969). Nació en Pachuca, Hidalgo, el 21 de julio de 1917 y Murió el 27 de marzo de 1998 en la ciudad de México.

PRESEA BELLAS ARTES

PARA JOSÉ CABALLERO

Por su destacada trayectoria en el teatro mexicano, como director de escena, dramaturgo y actor, el INBA entregará la Medalla Bellas Artes a José Caballero, en ceremonia que se llevará a cabo el 23 de octubre a las 19 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes. Con 45 años en los escenarios, José nace en la ciudad de México, 1955 y se consolidó como uno de los más reconocidos directores y formadores de actores en el país. Aunado a ello ha realizado por décadas una generosa labor como docente e investigador. También se ha desempeñado como funcionario en la Universidad Autónoma Metropolitana, la Universidad Nacional Autónoma de México y en la Compañía Nacional de Teatro del INBA. Miembro del Sistema Nacional de Creadores, dirigió más de 80 montajes para el teatro, desde William Shakespeare hasta Bertolt Brecht, pasando por Sor Juana Inés de la Cruz y Calderón de la Barca, entre muchos otros y es autor de obras como La suerte suprema y Frente al olvido.  Inició su formación al integrarse a la generación fundadora del Centro Universitario de Teatro (CUT), donde estudió dirección escénica con los maestros Juan José Gurrola, Héctor Mendoza y Ludwik Margules, así como actuación con Luis de Tavira y Julio Castillo. En 1974 dirigió El pelícano de August Strindberg, que fue su primera puesta en escena y por la que fue nominado como mejor director por los críticos de teatro. Dos años después se graduó del CUT con el montaje de Un día de octubre de Georg Kaiser. Su talento lo llevó a dirigir desde muy joven a grandes figuras de la escena, como Isabela Corona, Carlos Riquelme, Augusto Benedico y Virginia y Miguel Manzano.

CON EL TIEMPO SERÁ

UN POETA POPULAR

Los primeros libros de Juan son parsimoniosos, de amplitud de versificación, de versículos más que de versos al estilo de la Biblia. Digamos, es un tono que no se conocía en la poesía mexicana. Su obra es muy importante. Por desgracia no es un poeta conocido, Juan Bañuelos no es un poeta al cual la gente se acerque demasiado. Hay poetas populares que luego pierden su vigencia, él quizá vaya en sentido inverso: un poeta no popular que va a ser al final del tiempo mucho más conocido de lo que es ahora, asevera Jaime Labastida. La poesía de Juan Bañuelos, decía el argentino Juan Gelman (quien no tenía nada poético), embellece aquello de su entorno que a la razón transgrede, funde su mito personal con los mitos del pasado y en sus palabras conjuga a los contrarios y los ciñe en una unidad metafísica. La voz crítica de Bañuelos apela a la palabra justa y la plasma en lo que Pedro Ángel Palou refirió como poesía social. Su compromiso con la realidad social lo manifestó desde su primer libro, Puertas del mundo, y se involucró con el movimiento zapatista, así como con los derechos de los pueblos indígenas. Así opinan del excelente, pero nada popular poeta chiapaneco, a quien la Coordinación Nacional de Literatura del INBA decidió recordar el próximo 17 de octubre a las 19 horas, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes. María Baranda, Micaela Morales López y Jaime Labastida hablarán de la vida y obra del creador chiapaneco. Fue miembro fundador del Ateneo de Chiapas; coordinó varios talleres de poesía de la UNAM y de las universidades de Guerrero, Querétaro, Sinaloa y Chiapas. Puertas del mundo, en La espiga amotinada (1960); Escribo en las paredes en Ocupación de la palabra (1965), Espejo humeante (1969), No consta en actas (1971), Destino arbitrario (1982), Donde muere la lluvia (1992) y El traje que vestí mañana (2000), forman parte de su obra publicada, la cual ha sido traducida al checo, polaco, húngaro, noruego, sueco, búlgaro, rumano y alemán. La poesía de Bañuelos fue reconocida con numerosos premios, entre los que destacan el Premio Bellas Artes de Poesía Aguascalientes en 1968, por el Espejo humeante, y el Premio Iberoamericano Bellas Artes de Poesía Carlos Pellicer para Obra Publicada en 2001, por El traje que vestí mañana. En sus inicios el escritor chiapaneco formó parte del grupo integrado por cinco poetas mexicanos que en 1960 publicaron el volumen colectivo La espiga amotinada, el cual reunía: Puertas del mundo de Juan Bañuelos; La voz desbocada de Óscar Oliva, La rueda y el eco de Jaime Augusto Shelley, Los soles de la noche de Eraclio Zepeda y El descenso de Jaime Labastida. Nuestro personaje en cuestión nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 6 de octubre de 1932 y murió en la ciudad de México, el 29 de marzo de 2017), también fue ensayista, editor y catedrático universitario y sus poemas se han traducido a más de 10 idiomas.

Acerca de Juan Carlos Machorro

El autor no ha proporcionado ninguna información.

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