Mis queridos lectores, iba yo el domingo así casual, caminando, disfrutando del paseo, cuando pasé por una tienda de videojuegos y entonces, un promotor de… ¿Nintendo, Lamatel, Club Nintendo o Nintendomanía?, no lo sé, me convenció de comprar Super Smash Bros para Wii U con el adaptador y control de GameCube.
Y, he de aceptar que parte de la «magia» de Nintendo es saber vender accesorios que no son necesarios.
Pero bueno, una cosa no quita la otra. Uno de los grandes títulos multijugador es Smash Bros, sobre todo ahora que hasta 8 jugadores pueden participar. Y lo mejor es la combinación de controles que permite, obviamente, uno tendrá el control pantalla, y los siete restantes pueden usar: Wiimote, Wiimote y Nunchuck, Classic Controller, Classic Controller Pro, Wii U controller pro, control de GameCube y el 3DS.
Al tener tantas opciones de control es fácil encontrar amigos que posean alguno de esos controles y así poder invitarlos a jugar.
Pero lo importante es el factor diversión, y ahí sí, pese a quien le pese, Super Smash Bros es muy divertido, sobre todo ahora con las figuras Amiibo, que también terminé comprando…
Y Nintendo debe estar muy feliz, tomando en cuenta que la versión para 3DS ya lleva vendidas 3.5 millones de unidades y la de Wii U logró vender 500 mil unidades en 3 días.
De rápido les escribo que Sony tendrá que compensar económicamente a los que compraron la consola PS Vita antes del 1 de junio del 2012, porque la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos dictaminó que Sony engañó a los compradores al hacerles promesas que nunca se cumplieron o que funcionan a medias. Sony prometió que cualquier juego de PS3 sería compatible con la función de juego remoto o el multijugador sobre redes 3G, entre otras cosas. Los compradores que serán compensados, recibirán por correo electrónico una notificación y tendrán derecho a recibir un vale por $50 dólares para usarlos en el bazar de Playstation.
Ofertas, ofertas por doquier, en los bazares de Xbox y Playstation, también en Origin y Steam, a gastar, a gastar, que el año se va a acabar.
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