Los residuos peligrosos son sustancias tóxicas, corrosivas, reactivas o biológicos-infecciosas que no deberían de llegar al medioambiente o reingresar a los ciclos de reciclaje ya que representan un peligro para el equilibrio ecológico y ambiental, por eso, su correcta gestión desempeña un rol esencial para la seguridad, la salud pública, la lucha contra la contaminación y la preservación de los recursos.
Ante la emergencia climática, sociedad, gobierno e industrias juegan un papel fundamental para enfrentar el gran desafío de adaptar sus procesos para mitigar el riesgo ambiental. Cabe mencionar que tan solo en México, se generan 1.9 millones de toneladas/año de este tipo de desechos, según registros del Diagnóstico Básico para la Gestión Integral de los Residuos; entre 2004 y 2017 se generaron 2.45 millones de toneladas de residuos peligrosos.
Por ello, es crítico que las organizaciones, empresas e industria trabajen en conjunto para enfrentar los tres principales desafíos ambientales: frenar la contaminación, evitar la pérdida de biodiversidad y mitigar el cambio climático a través de una gestión adecuada de los residuos peligrosos. Para lograr este fin, la reglamentación internacional y local es fundamental.
“Tan sólo a principio de año, la UNEA-5.2 (Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente) dio a conocer una iniciativa de tratado global que busca detener la contaminación de plásticos a nivel internacional, lo mismo, debería de pasar con el manejo de residuos peligrosos”, comentó Carlos Silva, presidente de ISWA.
Y agregó: “necesitamos urgentemente lograr una armonización de conceptos y preceptos de cómo manejar de manera eficiente los residuos peligrosos. Tenemos que tener regulaciones en conjunto para resolver y afrontar la problemática de manera eficaz ya que este tipo de desechos no conocen frontera”.
A nivel mundial existen diversas regulaciones que llegan a dificultar el manejo de residuos peligrosos, por lo que es necesario crear estructuras sólidas para su gobernanza encaminados hacia una mejor gestión residual. “Es urgente que se discuta la creación de una ley global de residuos peligrosos; la contaminación química es tan importante como el calentamiento global, por eso debemos de aprender a gestionar de manera eficiente los residuos”, argumentó Nicolas Humez, director de Asuntos Públicos, SARP Veolia.
La aceleración y aplicación de nuevas tendencias vienen acompañadas por una estricta normativa por parte de los gobiernos y consumidores. La pandemia visibilizó aún más el impacto de los residuos hospitalarios y la importancia de su gestión especializada debido al riesgo biológico implicado en este tipo de desechos. La lucha contra la contaminación y la preservación de los recursos ha hecho que las tecnologías de tratamiento de los residuos peligrosos ofrezcan procesos donde éstos pueden llegar a tener una nueva oportunidad, muchos de ellos ligados a la producción de energías eficientes.
“El reciclaje de residuos peligrosos y su manejo es vital para impulsar la economía circular, si no aprendemos a hacerlo corremos el riesgo de que lleguen al medioambiente. Nuestra responsabilidad es impulsar la regulación y garantizar que estas sustancias tóxicas no ingresen a nuestro cuerpo, debemos de brindar la certeza de que todo lo que regrese al mercado sea libre de sustancias tóxicas, esa es nuestra responsabilidad”, agregó Humez.
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