Hace días se informó que se comenzó el trabajo de colocación de anillos de identificación a los 200 ejemplares del Aviario del municipio de Ecatepec, lo que permitirá tener un inventario actualizado y la creación de una base de datos de las especies que en él habitan.
Con esta medida se completa el proceso de acreditación y regularización que requieren la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para la estancia de estos animales silvestres en el municipio de Ecatepec, el cual es socio de ICLEI-Gobiernos Locales por la Sustentabilidad.
En comunicado de prensa, Rodrigo Gallardo Hernández, responsable del área médica del Parque Ecológico Ehéctal, explicó que personal capacitado colocó una especie de pulsera en una de las patas del animal, las cuales están grabadas con una clave conformada por la letra “E” de Ehécatl, otras dos que refieren el nombre común y el número de ejemplar.
Añadió que “la finalidad es tener identificadas a las aves, y si nosotros estamos creando una base de datos es para saber qué ejemplares tenemos y sus condiciones, si tenemos algún problema también lo tenemos identificado”.
En este Aviario habitan 200 aves de 38 especies, desde un ñandú que pesa casi 30 kilogramos, hasta el periquito australiano de tan sólo 30 gramos, quienes logran sorprender a los casi 6 mil visitantes que registra cada semana este lugar.
El parque ecológico Ehécatl, la entrada es gratuita de martes a domingo, es visitado por niños y hasta personas de la tercera edad de los municipios cercanos, como Coacalco, Tultitlán, Tlalnepantla y algunos del Distrito Federal, de Sonora y de Jalisco, inclusive han llegado turistas de Colombia y de Venezuela.
Sergio Díaz Hernández, encargado de despacho de la Presidencia Municipal, refirió que implementar este tipo de acciones contribuyen a que el parque y las especies animales que en él habitan, ofrezcan a sus visitantes la certeza de que los requerimientos para funcionar están en las mejores condiciones.
Ahí se fomenta el cuidado a la vida silvestre, pues se deja en claro que éstas no son mascotas, ya que requieren de atención especial, por lo que está prohibida su comercialización y además, hay varias en peligro de extinción.
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