Sustentabilidad

En los pasados 6 años se inauguraon 15 nuevas zonas arqueológicas

Con la apertura de las zonas arqueológicas Lagartero e Iglesia Vieja, en los municipios chiapanecos de Ocosingo y Tonalá, respectivamente, se llego a la cifra de abrir al público 15 nuevos asentamientos prehispánicos en los pasados 6 años.

            Autoridades de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH-Conaculta), acompañados de la secretaria de Turismo de Chiapas, Doris Pérez Solís, efectuaron un recorrido por Lagartero, sitio que junto con Iglesia Vieja, suman ya diez zonas arqueológicas abiertas a la visita pública en esa entidad.

Lagartero, es colindante con Guatemala, fue habitado hace 1,700 años y representó un lugar de paso de aspectos culturales e ideológicos entre distintos grupos de filiación mayense. Por su parte, Iglesia Vieja, localizado en la costa chiapaneca, fue un sitio ocupado antes de nuestra era (250-400 a.C.) y pudo funcionar como una capital de poblaciones anteriores a los zoques del área del Istmo, en una posición intermedia entre los grupos mayas y los zapotecas de Oaxaca.

En seis años, el INAH a través de su Delegación en Chiapas, destinó en promedio 3 millones de pesos para cada uno de los proyectos de investigación en Lagartero e Iglesia Vieja, monto que también incluyó su mantenimiento.

Asimismo, para dar certeza jurídica a los sitios, se invirtieron más de 7.5 millones de pesos en la compra de 30 hectáreas de Iglesia Vieja; en Lagartero, una porción del terreno denominado isla El Limonal, fue donada por la comunidad.

Para llegar a la plaza principal de Lagartero, zona arqueológica que complementa el atractivo natural de Lagos de Colón, en el municipio de Ocosingo, se camina por senderos ecológicos que permiten apreciar los cristalinos cuerpos de agua y la vegetación de la selva baja que rodean la citada isla, sobre la que se desplantan las construcciones precolombinas.

Según la arqueóloga Sonia Rivero, responsable del proyecto arqueológico, uno de los hallazgos más relevantes en esta zona arqueológica se registró a finales de 2009, cuando en la Pirámide Oeste se halló una estela de poco más de 2 m de longitud. Este monumento muestra a un jerarca maya sometiendo a otro personaje, que podría ser el retrato de un nuevo gobernante que asumió el poder hacia 1000 d.C.

Por otra parte, sobre una elevación (740 msnm) que se localiza a 4 kilómetros de la ciudad de Tonalá, se yergue la Zona Arqueológica Iglesia Vieja, que destaca por su arquitectura realizada con grandes bloques de piedra granita, de hasta 2 metros y más de una tonelada, lo que lo convierte en uno de los pocos sitios megalíticos en México, abierto también al público, este 29 de noviembre.

El arqueólogo Akira Kaneko, quien dirige las investigaciones del sitio, detalló que desde 2010, las labores estuvieron enfocadas a la consolidación de los denominados grupos B y C, en los que destacan grandes edificios, por ejemplo, la Estructura B-I, que alcanza los 95 m de longitud por 7 m de altura.

“De los más 20 sitios arqueológicos reportados en la región de Tonalá, en Chiapas, Iglesia Vieja es el más grande. Temporalmente coincidió con el dominio de Teotihuacan, pero hasta ahora no hemos encontrado indicadores de presencia teotihuacana”, abundó el arqueólogo Kaneko.

De acuerdo con las investigaciones y por su localización estratégica (entre la costa del Océano Pacífico y la Sierra Madre Oriental) y la influencia de distintas regiones de Mesoamérica, este sitio prehispánico fue habitado por una cultura local probablemente ligada al grupo zoqueano.

Comentarios Cerrados

Los comentarios están cerrados. No podrás dejar un comentario en esta entrada.