El ganador de las pasadas elecciones presidenciales en México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) recibió este miércoles del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en México, la constancia de mayoría que lo acredita como presidente electo para el periodo 2018-2024.
Con ello, por ley, López Obrador se convertirá a partir del próximo 1 de diciembre en el presidente constitucional de la República Mexicana número 65 en la historia del país.
En esa fecha sólo por protocolo, conforme marca la ley deberá juramentar el cargo en la Cámara de Diputados, en caso de no poder asistir a ese día, la constitución indica que desde el primer segundo del primero de diciembre, López Obrador ya será Presidente de México.
En sesión pública solemne, la presidenta de la Sala Superior del Tribunal, Janine Madeline Otálora Malassis, efectuada este día, entregó la constancia correspondiente a López Obrador y dijo que el país vive un momento histórico en materia de democracia.
Destacó que la entrega de la constancia de presidente electo es el momento culminante después de que 56 millones de ciudadanos emitieron su voto el pasado 2 de julio.
Desde esta fecha, AMLO dispondrá de una partida presupuestal que está prevista para utilizarse en el periodo de transición, que abarca del día este 8 de agosto al 30 de noviembre de 2018.
“Voy a cumplir todos los compromisos de campaña; no le voy a fallar a los ciudadanos y habré́ de ser fiel en todos mis actos al interés, la voluntad y el bienestar del único que manda en este país: el pueblo de México”, indicó López Obrador al dirigirse a la audiencia.
Añadió que “en lo que a mi corresponde, en mi carácter de titular del Ejecutivo federal actuaré con rectitud y con respeto a las potestades y la soberanía de los otros poderes legalmente constituidos; ofrezco a ustedes, señoras y señores magistrados, así́ como al resto del Poder Judicial; a los legisladores y a todos los integrantes de las entidades autónomas del estado, que no habré́ de entrometerme de manera alguna en las resoluciones que únicamente a ustedes competen”.
Sin embargo, la recepción de poderes no se dará de forma terza, ya que AMLO empezará a gobernar un país sumida en violencia, con graves atrasos en pobreza y con una economía paralizada.
Desde que entró en funciones la Administración de Enrique Peña Nieto, en diciembre de 2012, a la fecha, se han agregado 5 billones 225 mil 346 millones de pesos a la deuda pública, colocando la deuda total en 10 billones 578 mil millones de pesos.
En donde se señalan graves problemas de corrupción, dispendio de recursos y destinado de recursos públicos para destacar la figura presidencial, descuidando programas básicos de desarrollo nacional. Un caso de la mala colocación de dineros, es que la Secretaría de Medio Ambiente federal (SEMARNAT), en seis años cerró con una disminución de 70% de sus recursos monetarios que se destinaban para temas de medio ambiente y cambio climático. Como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), el saldo de la deuda que deja Peña Nieto representa 45.1 por ciento.
De igual manera se señala que los programas contra la pobreza que maneja el gobierno mexicano, siguen sin dar resultados, afirma un estudio de la Cámara de Diputados.
En los mil 115 municipios declarados zonas de atención prioritaria (ZAP) en el país, ocho de cada 10 habitantes “se encuentran desde 2015 en lamentables condiciones pese a los cuantiosos recursos públicos orientados a su desarrollo”, detalla el estudio.
Cabe mencionar que la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), está sumida en graves problemas de descredito ya que en las gestiones de José Antonio Meade (ex candidato presidencial del Partido Revolucionario Institucional -PRI-), y Rosario Robles, son señalados de forma no oficial de encubrir desvíos millonarios para empresas fantasma.
En México, las mediciones oficiales son diversas, pero se tienen estimados de que el 43.8 por ciento de la población vive en condiciones de pobreza; es decir como más de 53 millones de personas.
En el tema de pobreza y violencia, Olga Sánchez Cordero, nombrada por Andrés Manuel López Obrador como la futura Secretaria de Gobernación, ha dicho que “hay desplazamiento forzado en nuestro país por violencia o pobreza”. Por ello, se van a implementar Foros de Pacificación y Amnistía del país.
En el tema especificó de violencia, en México se vive un récord histórico ya que en los últimos dos años se estima que 3.7 personas son asesinadas por hora. Ejemplo de esta barbarie es que de enero y junio de 2018, se cometieron 88,7 homicidios por día.
Al cierre del primer semestre del año se registraron en México 15, 973 asesinatos, entre dolosos y culposos, superando en 18% el récord histórico establecido el 2017 en el mismo periodo, informó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Esta cifra representa la más alta registrada para un primer semestre desde 1997, año en el que empezaron las mediciones de la incidencia delictiva en el país y de que comenzó el despunte de los carteles de las drogas.
Los estados que encabezaron la lista de homicidios dolosos en este año fueron los estados de Baja California, con 1,294, Guanajuato con 1,203, Guerrero con 1,148 y el Estado de México con 1,073, aunado a que también han aumentado el feminicidio, robo, secuestro y extorsiones.
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