* Primero de mayo, día del trabajo, un día más sin el desfile de las organizaciones obreras que algún día fue emblema de la consideración que los regímenes de la Revolución tenían para con los trabajadores. Era ocasión para el anuncio de importantes beneficios para el sector laboral, con cargo al presupuesto del gobierno y al bolsillo de los empresarios. Se acabó el desfile y al mismo tiempo aparecieron nuevas formas de resolver las diferencias entre los sectores. El capital se instituyó como el poder dominante en la nueva realidad política y económica, en México y en el mundo. O al revés, en el mundo y en México.
* Porque las decisiones se tomaron a tiempo es que contamos con instituciones que mitigan las desigualdades económicas y sociales en nuestro país. El Instituto Mexicano del Seguro Social, la UNAM, el INFONAVIT, el Instituto Politécnico Nacional, el ISSSTE y el FOVISSSTE, el FONACOT. Son esos logros de un México que en casi todo el siglo XX se alimentó de las ideas de la Revolución y su consecuencia más representativa, la Constitución del 17, la primera de corte social en el mundo.
* No imagino a un México que a estas alturas pudiera construir semejantes instituciones. La firmeza de cimientos y de los muros, de esas que quedan, es tal que sería imposible derribarlas. Sí, hubo otras que los intereses del capital criollo y externo consiguieron echarlas abajo a costos que la sociedad, de una u otra manera, reciente. Los ferrocarriles, CONASUPO, puertos marítimos, banca, aerolíneas, aseguradoras, fertilizantes, desaparecieron o cambiaron de forma hasta colocarlas a distancia del aprovechamiento de la gente.
* Oportuna y pertinente la convocatoria de Miguel Ángel Mancera a revisar el salario mínimo. Aunque hay quienes afirman que es sólo referencia, en la realidad es mecanismo utilizado para ofrecer empleo de baja remuneración, en ocasión para disfrazar procedimientos utilizados para eludir prestaciones sociales en el monto que corresponde. La propuesta será presentada por el jefe de gobierno del Distrito Federal ante la Conferencia Nacional de Gobernadores, CONAGO.
* Acaso quienes deciden en el gobierno, sistema, y sector empresarial asuman que México debe fortalecer su mercado interno y no hay modo de hacerlo con una población de bajo, muy bajo, poder adquisitivo.
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