Opinión

Fuero militar y Elba Esther sacuden el país.

Elba Esther Gordillo

 

Los temas de coyuntura nacional sacuden  constitucional y políticamente. La  decisión de la Suprema Corte de Justicia, es histórica y desempolva la Constitución, al acotar el fuero militar para el Ejército y La Marina. La noticia es que los militares o marinos que violen garantías constitucionales serán juzgados por tribunales civiles. La Corte tomó en cuenta la recomendación y sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. El otro caso es político y múltiple, relaciona la educación nacional, el sindicato de maestros, la elección presidencial del país, la Presidencia de México y denuncias de fraudes multimillonarios; es el remolino llamado Elba Esther Gordillo, que todo arrolla. Once ministros lo decidieron por unanimidad: Sergio Salvador Aguirre Anguiano, José Ramón Cosío Díaz, José Fernando Franco Salas, Arturo Zaldívar Lelo, Jorge M Rebolledo Pardo, Luis María Aguilar Morales, Sergio A. Valls Hernández, Olga Sánchez Cordero y Guillermo Ortíz Mayagoitia. Es un acto histórico; sólo el tiempo dará el efecto. Muchos los aplauden, otros se preocupan. ¿El militarismo terminará de policía común, con marco jurídico común? ¡Ah!, maestra, tiene tanto poder y tanta contundencia que cuando habla es un remolino político. Ella es presidenta vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, SNTE, el sindicato más numeroso de América. Su existencia y razón de ser líder es la defensa de los maestros sindicalmente. Y cada día ganan más, tienen más prestaciones y prebendas. El puesto le da para ser legisladora, para negociar apoyos electorales, como confesó que pactó con Felipe Calderón, cuando era candidato presidencial, a cambio de una reforma educativa (que no se da integralmente) pero incursionó en lo electoral y luego tuvo opción para dirigir el ISSSTE, institución en quiebra por Miguel Angel Yunes, la Lotería Nacional, de muchos dineros, con González Roaro y la Seguridad Nacional, con un arribista como Roberto Campa. Y hoy la maestra vende sus virtudes al mejor postor. Dice que ya la buscó Santiago Creel; se dice que Humberto Moreira coquetea. Y ni la culpen de que no haya reforma educativa, un sindicato no se funda para eso. Viva México. r

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  1. Anónimo