Opinión

Atisbos

SUBALIMENTACIÓN.- Una vez que el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática terminó de ordenar la información del Censo de Población y Vivienda 2010, nos enteramos el pasado 28 de marzo que el territorio nacional está ocupado por 112 millones 336 mil 538 mexicanos. La cifra da escalofrío porque revela una constante en el crecimiento de la población en tanto que la mayoría de personas enfrentan dificultades económicas para cubrir sus necesidades más elementales como la alimentación. Igualmente, hace unos días, Felipe Torres Torres, académico del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, dio a conocer que “nos encontramos ya ante un claro escenario de subalimentación que influye, de manera directa, en el desarrollo del país por sus secuelas en la desnutrición, la competitividad en el trabajo y en el desarrollo intelectual”. El análisis en el que se alerta de lo anterior, destaca que el precio de la tortilla –alimento elaborado de maíz, grano del que la población obtiene 60% de las calorías y 30% de las proteínas promedio que consume diariamente- se incrementó 400% entre el 2000 y lo que va del presente año. En contraparte, el ingreso familiar se ha deteriorado 30% en relación al salario mínimo, con el que apenas se pueden comprar cinco kilogramos de tortilla al día. De persistir esta tendencia, el consumo de tortilla de maíz -esencia de la cultura alimentaria de México- entre la población más pobre registrará una clara desaceleración por el fuerte gasto que representa y porque compite con el acceso a otros bienes básicos. La situación se agrava porque 50% de la población que cuenta con empleo obtiene ingresos no mayores a dos salarios mínimos y el costo de una canasta básica alimentaria puede alcanzar tres de esas percepciones. Lo anterior lleva a la conclusión de que el crecimiento poblacional va aparejado con el crecimiento de la pobreza y el deterioro de la salud a causa de deficiencias alimentarias, derivadas, éstas, de la precaria economía de los mexicanos. El investigador universitario recuerda que al inicio del sexenio de Vicente Fox el precio del kilogramo de tortilla era de 2.50 pesos, que representaba 6% del gasto familiar para quienes no ganaban más de tres salarios mínimos; al inicio del gobierno de Felipe Calderón la cotización alcanzó seis pesos por kilo y para 2008 pasó a alrededor de nueve pesos a nivel nacional durante la llamada “crisis de la tortilla”. Empero, la tendencia alcista continuó de manera irrefrenable y a partir de enero de 2011 se ubica en 10.80 pesos en promedio. Actualmente, sépalo usted, hay presiones de los industriales de la masa y la tortilla para obtener un incremento mayor.

NUTRICIÓN.- En el Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional, Unidad Durango, el Instituto Politécnico Nacional desarrolló un cereal nutritivo para niños de edad escolar elaborado con maíz y frijol que contiene 38% más proteínas y 138% más fibra que los cereales comerciales. Los investigadores del IPN, coordinados por Oscar Velasco González, trabajan en el proyecto de este cereal nutritivo de bajas cantidades de azúcares desde hace diez años, y además de contribuir a mejorar la nutrición de los niños, le dieron un valor agregado al maíz y frijol que producen los campesinos del estado.

COBRO.- Para que la población más necesitada se beneficie realmente del subsidio que otorga el gobierno del Distrito Federal al consumo de agua, es preciso que el cobro se haga con base en lo que use y sea medido. Para el Partido Verde Ecologista de México es urgente cambiar el actual sistema de cobro de agua, que es muy complejo, provoca cobros excesivos, iniquidad y malestar, y optar por la instalación de medidores para que pague más quien consuma más, y, con ello, impulsar además una cultura real de cuidado del vital líquido. Esta propuesta la presentó el PVEM hace dos años en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y hasta ahora el PRD manifiesta interés por llevar a cabo esos cambios porque la política de subsidio al agua fracasó.

TERCIA.- Para darle más énfasis al sí se avanza en la construcción de la Refinería “Bicentenario” de Tula, Hidalgo, que se proyecta como la obra de proceso industrial más importante de PEMEX en los últimos 30 años con una inversión superior a los 11 mil millones de dólares y cuya capacidad de refinación de petróleo crudo Maya será de 250 mil barriles por día, más 76 mil barriles de residuales provenientes de la actual refinería, y que dará un fuerte impulso al Sistema Nacional de Refinación cuyo propósito es asegurar el abasto de combustibles en el país, y es compromiso del Presidente Felipe Calderón, los titulares de la Secretaría de Energía, José Antonio Meade; de PEMEX, Juan José Suárez Coppel; y del Ejecutivo estatal, Miguel Osorio Chong, sostuvieron una reunión de trabajo en el Palacio de Gobierno ubicado en la ciudad de Pachuca, “La Bella Airosa”.

Acerca de Rafael Cienfuegos Calderón

El autor no ha proporcionado ninguna información.

1 Comentario