Opinión

Atisbos

FRENO.- La IMPUNIDAD –así con mayúsculas- es el principal obstáculo para la impartición de justicia. Es lo que impide investigar las denuncias por violación a los derechos ciudadanos consagrados en la Constitución Política y castigar a quienes desde cualquier nivel de gobierno incurren en acciones que atentan contra la integridad física, económica, política, social, cultural y ambiental de las personas. En materia de derechos humanos México no avanza por el freno de la impunidad; por la facilidad con que servidores públicos que incumplen la legalidad encuentran protección en las lagunas que tienen un sinfín de leyes relacionadas con el respeto a las garantías individuales, o que simplemente reciben cobijo del gobierno al que sirven. El pasado jueves 10 se celebró el Día Mundial de los Derechos Humanos y fue ocasión propicia para denunciar que en nuestro país persiste la violación sistemática de los derechos ciudadanos, más que nada por las policías de los gobiernos federal, estatal y municipal, pero, también, por el mismísimo Ejército, institución que con el pretexto de cumplir la encomienda del Presidente Felipe Calderón de combatir al crimen organizado realiza cateos, detenciones, persecuciones, agresiones y torturas contra civiles que presume son sospechosos. Además, la fecha permitió recordar que por impunidad los responsables de matanzas como las de Aguas Blancas y Acteal; de violentar derechos civiles en Atenco y la ciudad de Oaxaca; y de violar y asesinar mujeres jóvenes y niñas en Ciudad Juárez, están libres.
NARCOPOLÍTICA.- Reza el dicho popular que “cuando el río suena es porque agua lleva” y este se puede aplicar a la voz de alerta que lanzó el Presidente Felipe Calderón sobre el riesgo de que el narcotráfico financie campañas (políticas), principalmente en elecciones locales. Hay información periodística en relación a que en enero de 2007 un alto funcionario del actual gobierno reveló que tenían informes de que “más de 100 municipios del país” eran gobernados por alcaldes “de quienes se sospechaba que habían recibido dinero del narcotráfico para sus campañas”. Recordemos que el secretario de Economía, Gerardo Ruiz Mateos, declaró en Francia que si el gobierno de Felipe Calderón no hubiera acentuado la lucha contra el narcotráfico “el siguiente presidente de la República sería un narcotraficante. Si se cuenta con información sobre lavado de dinero en campañas políticas y están identificados presidentes municipales o diputados sospechosos de tener nexos con algún cartel de la droga ¿Por qué el gobierno federal no actúa y aplica la ley? ¿Por qué como parte de la reforma política el Presidente Calderón no presenta una iniciativa de ley para auditar las campañas? Llama la atención que tratándose de un problema que vulnera la seguridad nacional, se hagan desde el gobierno declaraciones sueltas al respecto, sin precisiones y sin que estén acompañadas de acciones legales.
DESESPERACIÓN.- Todo parece indicar que el caso de la liquidación de Luz y Fuerza del Centro -a la que se oponen los trabajadores del SME con marchas y plantones que desquician la ciudad de México, y con una huelga de hambre de mujeres-, está agotando la paciencia del gobierno federal. Ello lo obliga a tomar decisiones desesperadas y ofrecer canonjías que no están contenidas en la Ley Federal del Trabajo, como una forma –así parece- de justificar ante la ciudadanía el despido de 44 mil jefes de familia y no verse tan mala onda. El cúmulo de privilegios de los trabajadores fue el pretexto para declarar la liquidación, empero como ex empleados el gobierno les da trato de reyes: primero, ofreció un súper bono a quienes acudieron a recibir su liquidación en los primeros 30 días; segundo, amplió un mes más el tiempo para realizar el trámite y mantuvo el bono pero al 70%; tercero, concedió a sus ex empleados un año de gracia en el servicio del IMSS. ¿Hay o no hay desesperación?
CEBOLLAZOS.- En la perspectiva del Presidente Felipe Calderón, Guillermo Ortiz tuvo un buen desempeño al frente del Banco de México porque logró abatir y controlar la inflación; Agustín Carsterns, que es, dijo, uno de los economistas más destacados del país, como secretario de Hacienda destacó por las medidas que tomó ante la crisis financiera mundial, salvando miles de empleos en México; Ernesto Cordero, desde la Secretaría de Desarrollo Social fortaleció el Programa Oportunidades y combatió la pobreza; y Heriberto Félix Guerra fue auxilio de las pequeñas y medianas industrias al otorgarles créditos para soportar la recesión económica, como subsecretario de Economía. El reconocimiento del Ejecutivo Federal a los funcionarios fue en el evento donde anunció su propuesta a la Cámara de Senadores para que Carstens se haga cargo del Banco de México, y nombró a Cordero y Guerra como secretarios de Hacienda y Desarrollo Social, respectivamente. O sea, todos ellos muy eficientes.

1 Comentario

  1. ¿Y qué le pediría Calderón a la Virgen de Guadalupe?
    Posiblemente esto:

    http://www.youtube.com/watch?v=vH8LPNyCwVk