Opinión

ATISBOS

Rosario Robles tendría trato preferencial si fuera delatora
Rafael Cienfuegos Calderón

Por no ser soplona, chivata o delatora, Rosario Robles cumplió ayer un año de reclusión en el penal de Santa Martha Acatitla. En este tiempo la exsecretaria del gobierno de Peña Nieto no se ha ofrecido para cooperar con la autoridad judicial y esclarecer la llamada “Estafa maestra”, caso que implica el desvío de recursos públicos, a pesar de que ello le valdría enfrentar el proceso en libertad como ocurre con Emilio Lozoya, exdirector de Pemex. EL Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero fue claro al responder por qué Lozoya está en su casa y Robles en la cárcel. Este individuo está haciendo una oferta formal y una denuncia de hechos de una circunstancia que ha generado un daño patrimonial de alrededor de 400 millones de pesos, en el otro caso no hay un ofrecimiento y es un daño por 15 mil millones de pesos. O sea que ser delator tiene ventajas ante la justicia y no serlo implica para el supuesto culpable estar encerrado en un penal sin haber sido enjuiciado. El 13 de agosto Robles Berlanga cumplió un año de encierro y apenas dos días antes la juez Cuatro del Distrito de Amparo en Materia Penal, María Dolores Núñez Solorio admitió el amparo que interpuso en septiembre de 2019 la defensa de la extitular de Desarrollo Social y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano para que pueda enfrentar en libertad el proceso. Llama la atención la situación en que se encuentra Rosario Robles, ya que por el supuesto desvió de 7 mil 760 millones de pesos de la “Estafa Maestra”, revelada por el portal de noticias Animal Político y la organización civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad, es la única que está presa y bajo proceso no obstante que se señala a 50 funcionarios de 11 dependencia del gobierno federal y ocho universidades públicas como responsables. Hasta ahora se desconoce si participó o no en el modus operandi y, por ello, como probable culpable que es, le asiste el derecho al beneficio de la duda y la consideración de la justicia para que tenga arraigo domiciliario. Ella denuncia persecución política y ser exhibida como trofeo del gobierno del cambio en la lucha contra la corrupción.

Acerca de Juan Carlos Machorro

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