Para la Secretaría de Turismo de Querétaro, El Marqués, ubicado a 59 km de la capital, es un sitio ideal para el turismo por su gran paisaje, región de origen otomí y desde 1726 recibiera dicho nombre en honor a don Juan Antonio de Urrutia y Arana, Marqués de la Villa del Villar del Águila.
Cabe mencionar que El Marqués se encuentran varios parques industriales con empresas nacionales y extranjeras. Además, alberga las instalaciones del Aeropuerto Intercontinental de Querétaro y se pueden admirar, y a veces visitar, 24 ex haciendas de los siglos XVII, XVIII, XIX. Además existe el Biomuseo El Marqués, que reúne flora y fauna característica del municipio.
La arquitectura de este templo cristiano cuenta con tres arcos de elevación circunferencial, de los cuales cada uno simboliza la búsqueda de la humanidad europea con nuestro Dios Padre.
En la actualidad, este templo rinde culto a nuestra Santísima Virgen de Guadalupe, la cual es festejada el 12 de diciembre de cada año. Para llegar baja la calle de la Plaza Central, justo después del pequeño parque que se encuentra pasando la Casa de la Cultura.
También se cuenta con la Presa del Diablo en donde se aprecian carpas y truchas negras, mientras en Wameru se pueden admirar jirafas, elefantes, tigres y exóticos monos. Además del Autódromo de Querétaro que cuenta con carreras locales y nacionales de autos y motos. Así como el Ecocentro Expositor contiene diversas exposiciones a lo largo del año y la Feria de Querétaro cada diciembre.
Desde tiempos prehispánicos, el maíz y el chile han sido parte fundamental de la cocina mexicana. El Marqués conserva esta tradición preparando atole, tamales, enchiladas y mole.
En cuanto a las artesanías tradicionales del municipio, destacan sus textiles en lana como sarapes, cobijas y tapetes elaborados en telares caseros; así como piedras de molino para nixtamal, molcajetes y metales. En San Vicente Ferrer se fabrica y se venden al público artículos en piel de carnero: chamarras, carteras o botas, entre otros.
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