La presencia del fenómeno de El Niño en el territorio nacional, oficializado a fines de mayo último, viene a complicar la situación para el cuidado y mantenimiento de los bosques y selvas nacionales, acosados por múltiples problemas, como la tala ilegal y el narcotráfico.
“Estamos rebasados, totalmente”, dijo el subprocurador de Recursos Naturales de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), José Ramiro Rubio Ortiz, al dar a conocer los avances registrados en la lucha contra los depredadores forestales.
La Profepa tiene detectados 119 municipios en 17 estados donde las bandas de talamontes operan casi a su antojo, ante la falta de inspectores forestales que suman sólo 600, aunque de ellos, 400 están en oficina y sólo 200 trabajan en campo.
Las zonas críticas corresponden a la Mariposa Monarca, Montes Azules, Sierra Tarahumara, Izta-Popo, Cofre de Perote y Sierra de Zempoala, pero tiene especial interés la Biosfera de la Monarca donde el programa de Profepa tiene como meta alcanzar cero tolerancia, en su combate contra los rapamontes.
La situación es grave. “Nos estamos enfrentando a delincuencia organizada, a negocios de mucho dinero, con muy pocos recursos”, comentó Rubio Ortiz, en su diagnóstico sobre esta lucha desigual que se enfrenta con el poco personal señalado y, además, con mínimos salarios que perciben quienes van a campo, por lo que pueden ser presa fácil de los talamontes.
“Se necesita fortalecer a la Profepa para hacer un mejor papel, tener gente mejor preparada y más capacitada”, confesó Rubio Ortiz, quien aseguró que, pese a tales circunstancias, la lucha no está perdida.
Consultados especialistas de la Academia Nacional de Ingenieros Forestales (Anci) coincidieron en tales apreciaciones pues los programas oficiales están dispersos y la anterior oficina fue desmantelada.
No obstante, tanto estos especialistas como la misma Profepa, indican que la lucha se está dando, frontalmente, contra talamontes y empresarios, especialmente, turísticos que intentan, a toda costa, diezmar las zonas selváticas del país.
PRESENCIA DE EL NIÑO
El pasado 29 de mayo se oficializó la entrada de El Niño al territorio nacional lo que traerá, como consecuencia, mayor aumento en la temperatura y menos lluvias, aunque algunas serán más desastrosas.
Con la presencia de este fenómeno, las ondas tropicales se encuentran muy al sur del Ecuador; los vientos y humedad suficientes no alcanzan a llegar a México, razón por la cual hay menos precipitaciones.
De acuerdo a meteorólogos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), los primeros 15 días de junio fueron terribles para el país, pues se tuvo un clima seco y la lluvia sólo acumuló 20 milímetros, algo terrible, ya que en 2008 en ese mismo lapso se registró una precipitación pluvial de 75 milímetros.
SE RECUPERA EL CUTZAMALA
La parte positiva de esta situación climatológica está el hecho de que El Niño traerá beneficios para la región centro del país, en especial, donde se ubican las 7 presas del Sistema Cutzamala que dota de agua potable al Valle de México.
Según las previsiones, habrá más y mejores precipitaciones pluviales en la región lo que permitirá acabar con la escasez de agua en esa zona y bastaría otro año de lluvias para que las presas se recuperaran al 100 por ciento.
El resto del territorio nacional, en cambio, padecerá sed y complicará la actuación de quienes se dedican a velar por el mantenimiento de selvas y bosques.
México, erosión galopante
Alejandro Soto, gerente de la región XIII de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), indicó que nuestro país padece de una erosión grave que en su gran mayoría es por la mano del hombre, y que entidades como Oaxaca, Chiapas, Quintana Roo, Chihuahua y Durango son quienes más padecen pérdida de suelos fértiles en nuestro país.
Situación que provoca la migración forzosa de 400 mil mexicanos ante la muerte de la tierra de campo. Situación alarmante que informa la Conafor llega al 24 por ciento del territorio nacional, es decir que 6 de cada 10 hectáreas de la superficie del país padece algún grado de degradación.
Esto está muy ligado a la pobreza, declaró el funcionario, por ello, destacó que la Conafor busca ayudar a la recuperación de suelos como el combate a la pobreza.
Además del combate a un hecho significativo en las ciudades como el DF que es el cambio de uso de suelo que engulle a las zonas de recarga a costa de las zonas urbanas. Destacando que lo prioritario es la paciencia a estos procesos que son de casi dos décadas para apreciar nuevamente zonas arboladas.
Erosión y México
– Desiertos de Baja California, noroeste de Sonora, costa oriente de Oaxaca y Guerrero son consideradas las peores zonas degradas de México.
– Suman 93.5 millones de hectáreas de suelo degradado en México.
– 22 millones de personas están afectadas por la pérdida de suelos.
– Se sufre de 600 mil hectáreas salinizadas por el uso agrícola.
– 36 millones de hectáreas padecen de sobrepastoreo. (18 por ciento del país).
– La tasa de desertificación es de 400,000 hectáreas anuales.
– La sequía afecta a más del 50% del país.
– De 2001 al 2007 la Conafor ha invertido 540 millones de pesos en restauración de suelos.
Fuente: Conafor, Semarnat, Greenpeace
Crecimiento económico sin afectar bosques
En el estado de México, al establecerse la Campaña Estatal de Reforestación 2009, cuya meta es sembrar 20 millones de árboles en 17 mil hectáreas. Se indicó que es posible crecer económicamente, sin que ello signifique depredar las zonas forestales mexiquenses.
En los últimos tres años en el Edomex se han sembrado 57 millones de árboles en casi 3 años y la meta sexenal es de 99 millones de árboles en 99 mil hectáreas, para así mejorar sus zonas forestales.
Al momento, van 91 ayuntamientos afiliados al programa de Pago por Servicios Ambientales, de manera que este año se lograron recaudar 64 millones de pesos para este rubro. Además, la Sedagro informó que se han realizado 2 mil 195 operativos contra taladores clandestinos, lo que dio como resultado que 805 personas fueran remitidas al Ministerio Público.
En el arranque de dicha campaña estatal, el gobernador Enrique Peña Nieto realizó la entrega simbólica de 8 cheques del Programa de Reforestación y Restauración Integral de Microcuencas (Prorrim), para trabajos de mantenimiento de plantaciones efectuadas durante los años 2006, 2007 y 2008, por un monto de 746 mil 975 pesos, correspondientes a mil 493.95 hectáreas, de un total de 18 millones de pesos que habrán de otorgarse por 18 mil hectáreas.
“Tenemos que sembrarlo en conciencia, en educación, en lo que inculquemos en valores a nuestros hijos. Yo aquí, convocó a todos los mexiquenses para que realmente asumamos una tarea y un compromiso muy decidido en cuidar de nuestros bosques y en sembrar vida, a través de la siembra de árboles en nuestras regiones, en nuestras comunidades, en nuestras casas”, agregó el mandatario mexiquense.
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