La disminución de la participación ciudadana en los procesos electorales perjudica a la democracia y a las instituciones. El abstencionismo, estimado en un 61 por ciento en la elección de Coahuila y 42 por ciento durante la jornada electoral en Nayarit, es un duro golpe para los partidos políticos que buscan ocupar posiciones para, desde ahí, trabajar por la ciudadanía.
Así lo informó el Partido Nueva Alianza a través de un comunicado en relación a las elecciones para elegir a 16 legisladores por mayoría relativa en el estado de Coahuila; 18 diputados locales, 20 alcaldes, 20 síndicos y 138 regidores en Nayarit; así como dos presidentes municipales en Puebla.
Informó que la elección de autoridades y diputados locales es de gran importancia porque son ellos quienes gobiernan con más cercanía a la gente; de sus decisiones, aciertos o errores depende directamente la calidad de vida y las actividades cotidianas de la gente; por ello, la disminución de su participación en la vida política del país, afecta la satisfacción de sus necesidades más inmediatas.
Resaltó que con base en los resultados preliminares hasta el momento obtenidos con candidatos propios y en coalición, Nueva Alianza demostró que juega un papel de equilibrio y concertación entre las distintas fuerzas políticas para lograr cambios en favor de la ciudadanía.
La alianza “Todos somos Coahuila” tiene clara ventaja en la mayoría de los distritos locales del estado, mientras que la alianza “Por el bien de Nayarit”, integrada por Nueva Alianza, PRI y PVEM, lleva la delantera en 16 municipios y 14 distritos.
La ciudadanía refrendó en comicios extraordinarios la candidatura de Pablo Flores Andrade, abanderado de la alianza “Compromiso por Puebla” en Cuapiaxtla de Madero, Puebla, que de acuerdo con resultados preliminares resultó ganadora al obtener mil 708 votos; mientras que en Acajete, la candidatura común de Antonio Aguilar va adelante con ocho mil 835 sufragios.
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