La empresa Unilever reiteró su compromiso para aprovechar de manera responsable el vital líquido, a través de sus esfuerzos alrededor del mundo alineados a su Plan de Vida Sustentable y los Objetivos Globales de Desarrollo Sostenible de la ONU.
Ya que según la organización Water Resources Group se estima que para el año 2030 no se podrá satisfacer el 25% de la demanda total de agua.
La empresa detalló que conscientes de las consecuencias que esto implica para la seguridad alimentaria, la salud y la calidad de vida de las personas, Unilever se ha fijado el objetivo de reducir a la mitad el uso del agua asociado con el consumo de sus productos en los países con escasez de agua.
Al mismo tiempo que la compañía trabaja en su Compromiso Para Una Nutrición Sustentable bajo su primer pilar “Bueno para las personas y el planeta”, que busca brindar alimentos nutritivos, cultivados de forma sustentable.
Actualmente la agricultura consume 70% del agua dulce accesible en el mundo. Se estima que para 2050 esta demanda crecerá un 19%, lo que incrementará los problemas de escasez en algunos lugares del planeta, con un impacto directo en la pobreza y la seguridad alimentaria.
“La creciente escasez de agua es un gran riesgo para nuestro crecimiento futuro, por ello, buscamos el desarrollo de productos, dispositivos y servicios que satisfagan las necesidades de agua de nuestros consumidores en los países con escasez; trabajamos con nuestros proveedores en la reducción del agua utilizada para el cultivo de nuestras materias primas agrícolas; y buscamos eficiencias que reduzcan el consumo de agua en nuestras fábricas a nivel mundial”, afirmó Gerónimo Rivera, Gerente de Sustentabilidad en Unilever México.
Las plantas de Unilever en México, ubicadas en Lerma, Tultitlán, Talismán y Civac, donde se producen marcas como Knorr, Hellmann’s, Primavera, Maizena, Rexona, Sedal, Zest, entre otras, son referente en sustentabilidad, pues cumplen con la línea de acción para lograr el objetivo de reducción de agua, el cual consiste en utilizar una menor cantidad de agua en sus procesos de manufactura contra el año 2008, sin importar que el volumen de producción aumente año con año.
En el área de servicios de planta Lerma, se redujo significativamente el consumo de agua, a través de la sustitución de torres de enfriamiento convencionales por torres de enfriamiento seco, las cuales evitan la evaporación del agua. Mientras que en planta Tultitlán, se implementó un circuito cerrado para pre-enfriamiento de pasteurizadores, que permite recircular el agua para no desaprovecharla. Asimismo, en planta Civac se capta agua de lluvia para ser empleada en algunos servicios y lavado de pisos. Por su parte en planta Talismán, se reutiliza toda el agua proveniente de su planta de tratamiento, con el fin de reducir consumo de agua potable en servicios y evitar la salida de agua tratada del sitio, siendo cero descargas.
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